28 de mayo de 2008

ASHLEE SIMPSON-WENTZ

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Ashlee Simpson ya ha estrenado matrimonio y qué mejor manera de hacerlo que siguiendo la estúpida tradición norteamericana de adoptar el apellido del marido. En este caso, el nombre de Ashlee Wentz lo usaría como nombre real, y su nombre artístico pasaría a ser Ashlee Simpson-Wentz. La cantante está tan contenta de su proeza que ha decidido contarlo a People de este modo: "Creo que es algo que una mujer debería hacer cuando se casa con un hombre. Es una tradición que creo que es genial".
En fin, si hubiéramos sabido antes que estrenar un apellido por el que jamás la van a llamar (porque reconozcámoslo, para nosotros seguirá siendo Simpson) le hacía tan feliz, nosotros mismos nos hubiéramos inventado uno. Por ejemplo... Ashlee Simpson-Dumbass.
Pero lo que sí sabemos es que, a pesar de que pensábamos que ella era una de las personas más idiotas del planeta, nos hemos dado cuenta de que hay gente que le supera en estupidez. Como su marido, que aunque sabíamos que muchas neuronas sanas no le podían quedar teniendo tan mal gusto por las mujeres y ese horrible peinado de lametón de vaca, no sospechábamos que fuera tan profundamente retardado.
Lo decimos, porque normalmente, este tipo de conductas las tienen los niños de alrededor de... ¿cuánto? ¿5 años? Bueno, pues aquí le tenéis a él, con un plato de papel a modo de improvisada careta en la que ha escrito una dirección de e-mail atestada de virus informáticos.
Lo primero en una situación como esta sería preguntarse quién será el gilipollas que ha utilizado esa dirección de e-mail para comprobarlo, pero hagamos la vista gorda para no ofender al pobre desgraciado que nos hizo el favor de advertirnos.
Por lo que pasaríamos al siguiente detalle, y es que Ashlee Simpson(-Wentz) se halla paseando junto a un hombre que lleva en su cabeza un plato de cumpleaños agujereado y se regodea ante la prensa que les da de comer... ¿No suena ridículo o surrealista?
Será que no hay por donde agarrar a esta pareja tan _________ (RELLENAR CON UN ADJETIVO).

1 comentario:

Anónimo dijo...

¡Uf! Es que no tengo palabras para poder calificarlos como e merecen...